CANCÚN, Q.R., Lunes 6 Diciembre de 2010.
CONSTE!
SIN REPRESIÓN
+ Cumbre de Cancún: ausencia de persecución a ambientalistas
+ En Copenhague 2009, casi 1.750 arrestados, encarcelados, vejados…
+ Tampoco existe la colosal desorganización registrada en la COP15
Por CARLOS CANTÓN ZETINA*
carlos_cantonz@hotmail.com
En Copenhague (2009) hubo caos, disturbios, errores del gobierno y… brutal represión oficial contra manifestantes. Unos 1.750 fueron arrestados, la mayoría encarcelados y maltratados. La imagen de la ciudad y del país “de primer mundo” quedó severamente dañada, aparte del fracaso de las negociaciones de la cumbre climática (COP15).
En Cancún (2010) los trabajos de la COP16 se han desarrollado sin mayores sobresaltos, ya hay logros en materia ambiental; la organización del evento se ve impecable y, por fortuna, no se han registrado desórdenes graves ni las fuerzas públicas han “garroteado” ni detenido a uno solo de los miles de altermundistas que están aquí. La imagen de este destino turístico logra posicionarse ante los ojos del mundo como un lugar seguro. La imagen de México entero se revalúa.
El deseo sobre todo de los quintanarroenses es que la cumbre continúe así, civilizadamente. Todavía quedan cinco días, aún no es tiempo de fanfarrias. Ya se anunció para mañana martes 7 la más numerosa manifestación de defensores del medio ambiente, aquí en Cancún, y el riesgo de confrontaciones o desórdenes está latente. Lo ocurrido en Copenhague justifica, sin duda, el aparato de seguridad montado en esta ciudad. Aunque causa molestias a la ciudadanía, es por el bien de todos…
Pero hasta ahora, hay suficientes motivos de orgullo para los anfitriones. No se han producido mayores quejas acerca de la organización y la logística, y las manifestaciones de los activistas sociales se han desarrollado de manera pacífica. Esto es resultado, en gran medida, de adecuadas tareas de inteligencia y conciliación no sólo del gobierno federal, sino también del estatal.
Apenas ayer domingo hubo en el corazón de Cancún una marcha de casi 1.000 inconformes con el actual régimen económico mundial. Ningún incidente de relevancia, igual que en las anteriores protestas. Si acaso, activistas que se metieron a predios privados para colocar carteles donde expresan sus demandas.
Algo es real: existen a la fecha diferencias sustanciales entre Copenhague 2009 y Cancún 2010. Esta ciudad mexicana sale ganando en un corte de caja luego de que han transcurrido siete días de la histórica cumbre internacional contra el cambio climático. (Inició el lunes 29 de noviembre, concluye el viernes 10 de diciembre).
La conclusión es que México tiene muy en cuenta los errores cometidos en la COP15, y ha mostrado voluntad política para que no se repitan.
Hoy lunes, día 8 de la conferencia mundial de la ONU cuya sede es Cancún, cuando comienza la etapa decisiva, no es ocioso recordar que la anterior reunión realizada del 7 al 18 de diciembre de 2009 en la capital de Dinamarca se “distinguió” no solamente por la inexistencia de acuerdos relevantes sino también por lamentables hechos:
1.- Severos disturbios durante las manifestaciones.
2.- Condenable represión policial y judicial.
3.- Evidente desorganización.
4.- Equívocos del gobierno danés.
5.- Falta de previsión de la ONU respecto a la masiva afluencia de participantes y visitantes.
6.- Insuficiencia hotelera. Cientos de participantes se quedaron en la calle. No había la capacidad para recibir a tanta gente.
7.- Los altermundistas, además de reprimidos, de hecho no tuvieron espacios para realizar sus reuniones alternas.
8.- El secretismo, o “acuerdos en lo oscurito” de algunos países participantes en la cumbre.
Quizá lo peor de todo fue la excesiva “mano dura” de las autoridades de Dinamarca que condujo a la prisión de Vestre Faengsel y otras cárceles a centenares de ambientalistas, muchos de ellos detenidos sólo por la “sospecha” de que podían cometer actos violentos. Hay quienes afirman que la represión estaba prevista y calculada de antemano, pues el Parlamento de ese país nórdico modificó previamente la legislación para aplicar desusadas penas contra quienes cometan desórdenes públicos.
Esa circunstancia, aunada a las restricciones y falta de espacios para los ambientalistas extranjeros y locales, así como la decisión gubernamental de realizar “detenciones administrativas” --de activistas-- para evitar hipotéticos hechos violentos, exacerbó los ánimos de los propios manifestantes. (En Cancún no se han dado esas situaciones).
Pero hubo más yerros del gobierno de Dinamarca:
a) El 9 de diciembre, apenas dos días de inaugurada la COP15, el influyente diario británico “The Guardian” puso al descubierto un documento de 8 páginas redactado nada menos que por el país anfitrión (Dinamarca), con fecha 27 de noviembre de 2009, mucho antes de que empezara la cumbre, que incluía un acuerdo para satisfacer a Estados Unidos y Reino Unido, NO a los países emergentes. El tema: reducción de los gases de efecto invernadero (GEI). Esto provocó un enfrentamiento entre naciones ricas y pobres.
(Por eso, Patricia Espinosa Cantellano, la canciller mexicana y presidenta de la COP16, ha insistido en decirles a los delegados del mundo que en Cancún no hay ni habrá acuerdos en lo oscurito. Apenas ayer domingo declaró: “Una vez más quiero decir que aquí no hay textos ocultos ni negociaciones secretas. La presidencia mexicana trabajará con plena transparencia”. Recuérdese que en Copenhague, además, hubo una reunión secreta de Estados Unidos, China, India, Brasil y Sudáfrica para tratar de imponer un acuerdo mínimo para “reducciones voluntarias” de emisiones de gases contaminantes).
b) El 16 de diciembre 2009, día 10 de la COP15, Connie Hedegaard, ministra de Medio Ambiente de Dinamarca, renunció como presidenta de la cumbre. Se fue advirtiendo el posible fracaso de las negociaciones para lograr un acuerdo. Fue un pésimo mensaje al mundo, un colosal error. La relevó el Primer Ministro, Lars Loekke Rasmussen.
En cuanto al caos organizativo, baste decir que miles de personas acreditadas quedaron sin poder entrar a la sede oficial de la cumbre (Bella Center) debido al colapso sufrido en lo que a previsiones se refiere. En el momento culminante de la cumbre, el martes 15 de diciembre (día 9), la ONU decidió retirarle sus credenciales a cientos de observadores (ONGs, periodistas, sindicatos, etc.); sólo un tercio de ellos quedó con acceso. Y el recorte siguió hasta el último día. De las 21.000 personas originalmente autorizadas para asistir a todas las sesiones, el miércoles 16 sólo podían entrar 7.000. El jueves 17 se redujo a 1.000.
La errónea medida provocó (el 16 de diciembre) un intento de asalto al búnker del Bella Center por parte de los enojados ambientalistas. Pero encontraron una dura respuesta policial, que arrestó a 250 de ellos. Es que el inmueble tiene capacidad para 15.000 personas, y había 46.000 acreditados. ¡La locura!...
REPRESIÓN EN COPENHAGUE
Garrotes, gases lacrimógenos y agua fueron lanzados contra altermundistas, lo mismo contra radicales que sí causaron disturbios que contra gente pacífica en diciembre de 2009. La vejación a los inconformes con el régimen económico mundial se divulgó en todo el orbe. Fue una reacción fascista del gobierno danés, repudiada por Amnistía Internacional, organismos de derechos humanos, colectivos de ambientalistas y la opinión pública mundial.
Fueron cuatro días, casi consecutivos, de severos disturbios durante la COP15:
1.- Sábado 12 de diciembre.- Día 6 de la cumbre. Fue la mayor manifestación contra el cambio climático, y también la más dura represión. Casi 100.000 activistas de gran número de países caminaron 6 kilómetros bajo un intenso frío hasta llegar al Bella Center, sede oficial de la COP15. Ocurrió el mayor arresto masivo en la historia de la “civilizada” nación nórdica: cerca de 1.000 detenidos, en su mayoría ciudadanos de Alemania, Dinamarca, Suecia, Francia, Estados Unidos e Inglaterra. Hubo un colosal error de las autoridades danesas: no previeron que, como sucedió, unos dos centenares de radicales se “colarían” al final de la marcha convocada por 516 organizaciones de 67 países; rompieron ventanas e incendiaron vehículos, lanzaron piedras y petardos contra el Ministerio de Asuntos Exteriores y la Bolsa de Valores. (Por eso aquí en Cancún se ha mantenido especial vigilancia sobre los “globalifóbicos” extremistas, que sobre todo el gobierno de Quintana Roo tiene bien identificados).
2.- Domingo 13 de diciembre.- Día 7 de la cumbre. La policía disolvió una pequeña marcha porque “no fue autorizada” y detuvo a casi todos los manifestantes, casi 300, bajo la acusación de “alterar la paz”.
3.- Lunes 14 de diciembre.- Día 8 de la cumbre. En la noche, la policía danesa intervino con gases lacrimógenos y vehículos lanza-agua contra una nueva manifestación callejera de altermundistas. Arrestó a casi 200. A 15 de ellos, antes de que iniciara la manifestación, de forma “preventiva”, es decir, sólo porque se les prejuzgó como posibles infractores de la ley. Previamente, grupos radicales habían levantado barricadas, prendido fuego y lanzado artefactos incendiarios --“bombas molotov”-- contra los agentes. Ocurrió en el barrio de Christiania, una base militar en desuso que, muy cerca del centro de Copenhague, fue “tomada” como refugio por extremistas.
4.- Miércoles 16 de diciembre.- Día 10 de la cumbre. La rabia de ecologistas a quienes se les cancelaron sus acreditaciones los hizo protestar duramente. La policía detuvo a 250.
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*Carlos Cantón Zetina es un periodista con una vasta trayectoria profesional de 45 años. Fue reportero y Jefe de Información del diario Excélsior y director general de las revistas de circulación nacional Quehacer Político, Polémica y Huellas.
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Twitter: @cantonzetina
